Ya todos conocemos la gran obra del genio y respetado escritor J. R. R. Tolkien, considerado uno de los mejores en el género de fantasía. Gracias a él, grandes directores de películas y series se han inspirado para realizar sus propias producciones, como Peter Jackson que, comenzando el siglo, llevó al cine la famosa trilogía El Señor de los Anillos, en 2001, 2002 y 2003 respectivamente. Luego, en 2012, 2013 y 2014 tuvo lugar la trilogía precuela de ‘El Hobbit’.
Teniendo en cuenta el éxito que adquirieron los filmes, Amazon Prime Video decidió que ‘El Señor de los Anillos’ tendrá su serie. La misma contará con JD Payne y Patrick McKay como los que coordinarán absolutamente todo. En tanto, el productor será Bryan Cogman. Anunciada en 2017, este proyecto ya tiene un largo recorrido aunque recién comenzó a filmarse a fines del año pasado.
En principio parece que la primera temporada llegaría a la plataforma en 2021 y contaría con 20 capítulos y, en lo que respecta a la trama, hasta el momento, se sabe que estará todo enfocado en la Segunda Era, entre 1350 y 1600.
Después del breve parate por el coronavius, el equipo de producción se encuentra ya inmerso en la preparación del rodaje, incluyendo la elección de los actores que formarán parte del elenco principal, entre ellos Robert Aramayo y Joseph Mawle, conocidos por su participación en la famosa serie de Game Of Thrones.
Sin embargo, lo que estos días está llamando más la atención es el proceso de selección de los extras. Más concretamente, de los extras que se encargarán de ponerse en la piel de los temibles personajes de los orcos. Buscan candidatos con rasgos que se ‘aproximen’ lo máximo posible en la realidad al de estas criaturas
Piden desde personas con piel seca, narices grandes, ausencia de dientes o pelo abundante… hasta gente muy alta, muy baja o con «caras parecidas a un bolso de cuero».
Esto ha llevado a muchos a pensar, dado lo inusual de los anuncios, que la producción podría querer recortar al máximo los gastos en el departamento de maquillaje y efectos especiales. Por lo tanto, su petición de personas ‘feas’ tendría una lógica de lo más funcional si se contempla desde esta perspectiva.